La experiencia pionera #corazonesqueescuchan impulsa el voluntariado universitario con personas mayores desde la Atención Centrada en la Persona. Los voluntarios de la Universidad Católica de Valencia se han formado en está técnica de la ACP y han dedicado su tiempo a escuchar a personas mayores que viven en residencias y centros LARES CV.
Juntos han elaborado su historia de vida con todos sus recuerdos, recuperando y actualizando episodios muy emocionantes , hasta anécdotas con valor histórico. Descubriendo en el proceso a unas personas maravillosas cuyas vidas tienen un gran valor.
Algo tan sencillo como sentarse junto a una persona y escuchar toda su vida, toda su historia. Algo tan sencillo pero a la vez tan importante, que ya ha creado un fuerte vínculo entre los #voluntariosconcorazon y los mayores de LARES CV.
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Es el caso de Paula Mira y Paquita Pérez, de la residencia Fortuny. Esta peculiar pareja, de 17 y 93 años respectivamente, ya ha terminado de realizar la historia de vida, pero esa pequeña hora a la semana se ha vuelto imprescindible para Paquita, que cada jueves espera con alegría a Paula. Llegado el día, se cuentan sus cosas y juegan al dominó, porque como dice Paula: “hemos cogido mucha confianza, Paquita es muy cariñosa. Al final, la historia de vida no era sólo para ella, las dos nos contábamos nuestra vida”.
Paquita, por su parte, está entusiasmada con Paula: “es encantadora, me quedaría con ella. Para mí, es como una hija más”. Semana tras semana, Paquita le ha contado a Paula su vocación de actriz, cómo inició un día la Ofrenda de flores a la Virgen cuando era fallera mayor de su falla, o cuánto se emocionó cuando su novio le pidió formalmente el matrimonio.
Si Paquita fue actriz profesional, Teodora Martínez del centro de día Albors, 77 años, dedicó su vida a la música. Cantó en numerosas emisoras de Valencia, y recuerda riéndose todas los piropos que le lanzaban: “esos ‘¡Viva tu madre!’ salían del alma”. Sus ojos aún se empañan cuando le cuenta su experiencia a María Vaello, 19 años, quien le escucha atentamente, sólo sonriendo de vez en cuanto. Se ha creado una química especial entre ellas. María dice llevarse “una gran amistad, y mucha alegría de Dora. Me he reído muchísimo, porque es una persona muy positiva, muy alegre”.
Así, todos los #voluntariosconcorazon de los distintos centros LARES CV han salido enriquecidos de esta experiencia de voluntariado. Andrea Calderón, 18 años, del centro sociosanitario del Carmen, ha descubierto la vida “muy completa y especial” de José Soler, 86 años, que está “muy contento, y muy agradecido”.
Malena Ruiz, 18 años, de la residencia de san José de Burjassot, ha vivido “una experiencia muy bonita, y muy interesante” con Filomena Martín, 91 años: “Ha sido espectacular escuchar todas las cosas que ha vivido”.
El programa #corazonesqueescuchan de LARES CV han servido para conectar a los voluntarios con las personas mayores a través de sus historias de vida, en una experiencia enriquecedora que no les ha dejado indiferentes.
